Hoy han arrancado en Madrid las sesiones del Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP) que va a juzgar los abusos y violaciones de los derechos humanos cometidos por multinacionales españolas y europeas en América Latina. No es sólo esto lo que se juzga: también la complicidad de la UE y sus estados a la hora de elaborar normas y negociar acuerdos que facilitan su expansión, apoyarlas económicamente e incluso protegerlas y “blindarlas” frente a las denuncias. Las sesiones continuarán durante hoy y mañana, todo el día.
Representantes de más de cien organizaciones, redes de campañas, sindicatos, defensores de los derechos humanos, etc., de Europa, América Latina y EE UU, se dan cita en el Salón de Actos de la Facultad de Matemáticas (Ciudad Universitaria). El objetivo es defender cada caso ante el Tribunal. Son más de 20 los casos presentados, desde México a Chile, pasando por Guatemala o Colombia.
Preside el Tribunal el magistrado español Perfecto Andrés Ibáñez, miembro del Tribunal Supremo. Entre sus miembros, Judith Chomsky, abogada especialista en abusos de las transnacionales; Gustave Massiah, fundador de ATTAC Francia; Francesco Martone, ex senador italiano; Alirio Uribe, presidente del Colectivo de Abogados de Colombia… y así hasta catorce miembros de reconocido prestigio.
Ibáñez ha dado comienzo a las sesiones con una intervención brillante, donde ha recordado que este es, nada más y nada menos, que un tribunal de conciencia, que analiza cuestiones que afectan gravemente a los derechos fundamentales del ser humano. Así pueden calificarse muchas de las actuaciones de las multinacionales, señaló, al igual que la complicidad de la UE en estas violaciones de derechos. Y recordó la frase usada en su día por Bertrand Russell para explicar la filosofía del Tribunal que llevaba su nombre, del cual este TPP es heredero: un esfuerzo guiado por la pasión y la inteligencia.
Hoy se defienden los casos relativos a la complicidad de la UE. Mañana los casos de violaciones de diversos derechos. Será nuestro turno, para acusar a Endesa y a Enel de querer destruir la Patagonia chilena, construyendo 5 mega-represas que van a destruir un ecosistema prácticamente virgen, en búsqueda únicamente de un beneficio económico de corto plazo.
Mabel Bustelo, responsable de la campaña de Conflictos y Medio ambiente de Greenpeace
Hace poco leía unas declaraciones de Zapatero, el cual decía que Chile es un gran país para invertir… y el pelotudo de Piñera (presidente chileno) ha respondido, «tenemos actitud de bienvenida a las inversiones españolas»…. claro con esos comentarios se valida en parte lo que dice Pedro, es más, acá en Chile, Barrick con su proyecto pascua lama ya empieza sus trabajos destruyendo los glaciares de la perla del valle (Alto del Carmen, 3° Región)… sin embargo, mientras existan personas que tomen conciencia del daño ambiental que provocan las multinacionales ya es un avance para proteger las maravillas del sur de Chile…ojalá siga la lucha por defender nuestra tierra, un pequeño logro le da un respiro a estas tierras llenas de vida, que el hombre con su ambición pretende destruir, engañando a mi pueblo, por que de todas formas solo se hace más rico el millonario y los pobres quedan donde mismo y sin un paisaje que contemplar… Saludos desde Chile!!!
Considero que es una perdida de tiempo absurda. Pondran juzgar, pero no sancionar o detener, las pretensiones de las compañias implicadas. Que obligaciones tienen legalmente las compañias de paralizar dichas obras, o los proyectos que tengan en marcha, en el caso que asi lo confirme la sentencia. Yo pienso que ninguna obligacion, puesto que ese tribunal, no puede inmiscuirse en las decisiones de los gobiernos, como el chileno y su decision de construir cinco represas en el rio Pascua y su afluente el baker. Me gustaria equivocarme ,pero siempre prevalecen los intereses economicos sobre los ecologicos. En la cumbre de Doha no se hizo nada para protejer el atun rojo, en peligro de extincion segun el cites. Ese tribunal no tiene ninguna credibilidad, ni de cara a la galeria. Yo mañana mismo me voy a comprar al corte ingles un kilo de atun rojo antes que se extinga. Me lo hare para cenar al horno con verduritas, rico rico que diria Arguiñano.
Estimado Pedro,
Obviamente puede haber diferentes puntos de vista. Este tribunal, efectivamente, puede juzgar pero su dictamen no tiene valor jurídico. Sin embargo, sí tiene valor moral y ético, y es una condena importante en términos de dejar claros los abusos cometidos en muchos casos por estas empresas. Un problema más de fondo es que, con la actual estructura del derecho internacional, ni este tribunal ni ningún otro tiene realmente el poder de frenar y sancionar a las multinacionales, salvo algunas pequeñas excepciones. Esto es lo que hay que cambiar. La condena ética del Tribunal de los Pueblos nos recuerda a todos que tenemos que avanzar hacia otro tipo de condenas, y que para eso tenemos que cambiar las leyes. Sobre la democracia chilena, decir que todas las encuestas de opinión celebradas en el país muestran a un 55%-60% de la población de Chile que se opone al proyecto de represar e inundar la Patagonia. Por eso la empresa Endesa está embarcada en una costosa y sofisticada operación de lobby y compra de voluntades… Los chilenos no quieren este proyecto, sólo lo quiere Endesa, que va a obtener grandes beneficios económicos con el mismo.
Un saludo,
Greenpeace