Ayer, 15 de febrero, en Amori (Japón) comenzó la primera parte del juicio contra los activistas Junichi Sato y Toru Suzuki que denunciaron la venta ilegal de carne procedente del Santuario Ballenero de la Antártida. Esta primera parte del juicio ha dejado en evidencia a la acusación, que difícilmente ha podido probar sus propios argumentos y cuyos testigos se han visto obligados a darle la razón a la defensa de Junichi y Toru en los puntos clave.
Del mismo modo, se contradijo en las declaraciones públicas realizadas con anterioridad en las que había insistido en que “que no existía ninguna práctica de entregar como obsequio carne de ballena a los tripulantes de los balleneros”. Ayer, admitió bajo juramento que, a raíz de las denuncias realizadas por Greenpeace en 2008, se ha dejado de realizar esta práctica.
“Las pruebas facilitadas por Junichi y Toru sobre la malversación de fondos públicos en el contrabando con carne de ballena son las mismas que hace 18 meses. Sin embargo, esta vez la versión ofrecida por los testigos de la acusación comienza a mostrar su debilidad ante el examen detallado del tribunal” ha declarado Celia Ojeda, responsable de la campaña Océanos de Greenpeace. “Parece evidente que la “versión oficial” de lo que se consideró “verdad” no se sostiene y, por lo tanto, debe reabrirse inmediatamente la investigación iniciada y denunciada por Junichi y Toru. De una vez por todas se debe juzgar a quienes están cazando ballenas en el Santuario de la Antártida, bajo una supuesta caza “científica”.
La acusación también llamó a declarar al gerente de la empresa de mensajería Seino Transport, la cual repartió las cajas con la carne de ballena en abril de 2008, una vez que la flota regresó del Santuario Ballenero de la Antártida. En su declaración, confirmó que pagó al propietario de la caja cerca de 30.000 yenes (aproximadamente 240€) de su propio bolsillo y no registró el pago. También admitió que el propietario le había indicado que la caja contenía alimentos y no el “cartón” que figuraba en el albarán.
El juicio ha llamado la atención de los medios de comunicación nacionales e internacionales, así como el apoyo de numerosos grupos defensores de los derechos humanos, abogados, políticos y más de 250.000 personas que han firmado la petición para que se cancele el proceso. El Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria dictaminó recientemente que el gobierno japonés había vulnerado los derechos fundamentales de Junichi y Toru durante su detención y procesamiento judicial (1). Esta es la primera vez que este grupo de trabajo hace pública en Japón una opinión de este tipo.
“Este juicio no trata tan sólo de una caja con carne de ballena. Trata sobre el respeto a los derechos humanos, sobre acatar las leyes internacionales y sobre la libertad de llevar a cabo investigaciones legítimas por el interés público”, ha añadido el Dr. Kumi Naidoo, director Ejecutivo de Greenpeace Internacional, presente en el juicio. “Es esencial que el primer Ministro Hatoyama muestre al mundo que su gobierno es lo suficientemente valiente para ser una verdadera democracia.”
La próxima vista del juicio tendrá lugar el 8 de marzo, día en el que la defensa llamará a declarar a sus testigos, incluyendo los miembros de la tripulación de la flota ballenera así como al catedrático Dirk Vorhoof, experto en derecho internacional (2). En el mes de mayo se expondrán las declaraciones finales y la sentencia se emitirá en junio en una fecha aún por concretar.
Nota:
(1) Dictamen del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas:
http://www.greenpeace.org/espana/reports/100210-02
(2) http://www.greenpeace.org/espana/news/100116
Que novedades hay?
Como fue el juicio?
Hola Kevin,
Por ahora el juicio parece ir bien, aunque es difícil saber como será el veredicto final. Desde Greenpeace esperamos que los tribunales japoneses sean capaces de ver, que a quien tienen que juzgar son a los que cazan las ballenas y a los que se lo permiten, pero que Junichi y Toru lo único que han hecho es denunciar un escándalo permitido por el Gobierno de Japón. Hasta ahora, han declarado los testigos de las dos partes. Los últimos en declarar han sido los testigos de Junichi y Toru; dos ex-balleneros, los propios Junichi y Toru y el Dr. Dirk Vorhoof, experto en derecho internacional, sobre todo sobre sobre la libertad de expresión y el Convenio Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos (ICCPR). El profesor Dirk Vorhoof presentó pruebas de sobre cómo éste juicio podría incurrir en una violación de la libertad de expresión y como Junichi Sato y Toru Suzuki están protegidos por el Convenio Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos (ICCPR)”.
Habrá una segunda vista en mayo, pero todavía no se le ha puesto fecha. El cierre del juicio tendrá lugar hacia el 8 de junio, y calculamos que el veredicto final tendrá lugar después de esa fecha en 4 o 6 semanas.
Agradecemos tu preocupación, porque Junichi y Toru, hicieron lo que muchos llevamos haciendo años, denunciar públicamente que la caza de ballenas es un error y que Japón esta incumpliendo los tratados internacionales, ocultando su caza a través de una supuesta caza «científica».
No sabemos si lo habrás hecho, pero queremos llegar al millón de firmas o ciberacciones y te agradeceríamos que la firmes y que invites a todos tus conocidos a que lo hagan: http://www.ciberactuacongreenpeace.es/?cyberid=82
Atentamente,
Greenpeace
Hola, les comento que llame a la Embajada de Japon en Buenos Aires para solicitar la liberacion de los activistas y el cese a la caza de ballenas, me pidieron
nombre, apellido y DNI.
Les envio esta informacion conforme como lo solicitaban en el mail que me enviaron. Saludos.
Maria
No me puedo creer que los allan detenido por eso, no me cierra..
Espero que al final la verdad saldra a relucir y se hara justicia.Con la absolucion de los activistas procesados, que no son los que debieran estar en el banquillo de los acusados, sino de aquellos que han tratado de encubrir la verdad.